Dia de muertos (Ribera de Chapala)💀🕯️
- Villa SJC
- 6 oct
- 2 Min. de lectura

El Día de Muertos en la Ribera de Chapala es una experiencia que se vive con todos los sentidos. Las calles se llenan de color, el aire huele a copal y pan de muerto, y los altares se iluminan con velas que guían el camino de quienes regresan por una noche para reencontrarse con sus seres queridos.
A orillas del lago más grande de México, Ajijic, Chapala y San Juan Cosalá se convierten en escenarios llenos de magia, donde las tradiciones se mezclan con el encanto natural del lugar.
San Juan Cosalá: una experiencia más íntima y auténtica

En San Juan Cosalá, el Día de Muertos conserva un encanto más tradicional. Los vecinos preparan altares en sus casas y organizan recorridos entre las calles del pueblo, donde se pueden observar ofrendas comunitarias. Aquí, el cementerio local se convierte en un punto de encuentro lleno de serenidad: familias enteras pasan la noche entre velas, música y recuerdos.
Imperdible: los altares colectivos que se instalan cerca del malecón y la parroquia del pueblo, con detalles que muestran la devoción y el amor de sus habitantes.
Ajijic: arte, cultura y una noche llena de luz

En Ajijic, las celebraciones se viven con un toque artístico. Las calles del centro se decoran con tapetes de aserrín, flores y papel picado, mientras los altares se montan frente a casas, gal
erías y restaurantes.

El malecón se ilumina con veladoras y catrinas que parecen cobrar vida al caer la noche. Cada año se realiza un desfile de catrinas y una exposición de altares tradicionales, donde locales y visitantes se reúnen para honrar la memoria de sus seres queridos con respeto y alegría.
Dia de muertos Chapala: altares rumbo hacia el lago:

Durante los días 1 y 2 de noviembre, familias, escuelas, negocios y asociaciones locales montan altares dedicados a personajes famosos, vecinos del pueblo o familiares queridos. Toda la avenida se llena de coloridas ofrendas adornadas con flores de cempasúchil, papel picado, veladoras, calaveritas de azúcar y fotografías.

El recorrido se ha convertido en una tradición muy esperada tanto por los habitantes como por los visitantes. Caminar por la avenida es una experiencia sensorial: el aroma a incienso, la música de fondo y la emoción de ver cómo cada altar cuenta una historia hacen que Chapala viva intensamente el Día de Muertos.
Vivir el Día de Muertos en la Ribera de Chapala es mucho más que asistir a una festividad: es adentrarse en una de las expresiones más profundas de la cultura mexicana. Entre el aroma a incienso, las flores, la música y la tranquilidad del lago, este rincón de Jalisco ofrece una de las celebraciones más bellas del país, perfecta para quienes buscan conectar con la tradición, la naturaleza y el arte.

Si planeas visitar la Ribera durante estas fechas, prepárate para vivir una experiencia que mezcla emoción, historia y belleza.






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